jueves, 29 de agosto de 2024



            El  accidente de mi hermana 
       La verdad no recuerdo qué edad tenía Grisel , creo que 11 años ,cuando se bajó de aquel ómnibus que regresaba de Nuevitas ,lugar donde se realizó la competencia infantil de Tenis de mesa y al cual ella había asistido . Lo que si nunca se borró de mi memoria fue el accidente que tuvo al cruzar la calle principal para correr hacia la farmacia donde trabajaba mi madre. Aún no estoy segura si mima  pudo ver cómo aquel camión atropelló a mi hermana .Debió ser desgarrador porque la pobre niña perdió alguna parte superior de su pie izquierdo . Fueron meses de hospitales,operaciones,injertos en el pie tomando partes de su muslo . Fue demasiado para mi pequeña hermana y para mi madre en aquellos tiempos y tratando de recordar toda esa tragedia en estos momentos ,la tristeza me invade porque cuando somos niños aún no tenemos conciencia de cuán duro puede ser una situación así para nuestros padres . Mi madre nos crió sola por muchos años y nos dio lo mejor que pudo con lo que tenía . Nos hizo fuertes y personas de bien de la mejor manera que supo hacerlo . 
Mi hermana pasó todo un curso escolar sin poder ir a la escuela y sus maestros y compañeritos pasaban por la casa para ayudarla con los contenidos de la escuela . Ella pertenecía a la banda escolar y su instructor pasaba por casa también y se preocupaba mucho . De igual manera lo hacía el chofer que la atropelló ,quien le buscó unos banquillos para que pudiera apoyarse mejor al caminar . Fue un año difícil y aunque yo estaba becada en la vocacional en esa fecha pude percibir lo difícil de cada momento . Ese accidente acompaña a mi hermana por toda su vida ya que su dedo grueso siempre perdió algo de independencia y la piel de ese pie se tornó delicada . Pero estoy segura que cada vez que lo mira recuerda el amor que muchas personas le brindaron durante ese período y el amor y la dedicación de nuestra madre ,que aún sin ser efusiva lo demostraba con las acciones una y otra vez en cada instante de nuestras vidas .
  

  



2 comentarios:

  1. Es muy fuerte esta historia que relatas. Duele de solo pensar cómo una niña de apenas 11 años tuvo que soportar ese accidente que le cambió bruscamente la vida. Sin embargo, al pasar de los renglones ese dolor se va convirtiendo en admiración de saber cómo fue superando obstáculos y cómo todos a su alrededor también fueron sacando lo mejor de cada uno.
    Esa resiliencia mostrada por Grisel, ese coraje de tu madrecita para ser papá y mamá en tan difíciles circunstancias, ese dolor inmenso que también te hizo (a ti) madurar más aprisa, esa participación de amigos, profesores e incluso el chofer que la atropelló, son una demostración de que las desgracias pueden motivar que las buenas personas saquen fuerzas de flaqueza y se conviertan en mejores de lo que ya son.
    Ese día del accidente fue tan negro como la noche más oscura, pero en medio de tanta negrura hubo acciones y personas que brillaron como estrellas, donde Grisel sigue reluciendo como una luna gigantesca que ilumina toda oscuridad.
    Son ustedes una familia fuerte y valiente de raza, dignos de imitar.
    Van para ustedes, mis saludos, respetos y admiración.

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    1. Bellísimas tus palabras y mucha razón tienes . Ese día marcó nuestras vidas para siempre !! gracias por visitarme

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