viernes, 21 de septiembre de 2018



















  Quiero contarte que estás en el mismo camino de mis miedos, a varios metros de mi silencio He vuelto al mirador aquel donde nos sentamos a contemplar el velero y la gaviota.El mar estaba tan azul y tan plano que provocaba tocarlo , pero me lo impidieron aquellas chicas que regresaron a buscar sus chancletas olvidadas.Claro que lo mejor de todo fue la brisa nocturna y aquel celador de la playa que nos confundió con vagabundos al vernos tirados en la arena cubiertos por la frazada verde con rayas.Terminaste burlándote de esas rayas y de mis medias tan parecidas
mientras recalcabas que te recordaba a las abejas ,olvidando por un segundo que eres adicto a la miel.Hoy estoy consciente que siempre te miré con mis ojos,llenitos de una imagen que alguna vez fabriqué yo misma porque no supe verte como eras.
Hoy,sentada en el mismo lugar, varios años después,sé que ha sido todo junto:’El velero, la gaviota,tú y por supuesto, el mar”

2 comentarios:

  1. Amiga, este texto es de una belleza que se extiende, a medida que se lo lee, como el mismo mar.
    Y la manera en que relatas el momento con sus ondulaciones de pensamiento, es deliciosa.
    Decir que me gustó es poco.
    Besos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Navegante :Es un elogio muy fuerte como diría mi hijo ...gracias por todo ,besos

      Eliminar

escribe un comentario
responder